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Las voces que aseguran que Raquel Bollo en Acorralados sigue el ejemplo de su compañera Rosa Benito en Supervivientes suenan cada vez con más fuerza. Si la cuñada de la Jurado jugó durante todo el reality con el coqueteo con el Míster Montalvo, la ex de Chiquetete parece hacer lo propio con uno de los Casanovas del país: Álvaro Muñoz Escassi.
El jinete no eligió a Raquel como ayudante en su nueva semana como capataz (eligió a Úrsula, que casualmente es Miss y tiene un cuerpazo de escándalo) pero parecen cada vez más cómplices. De hecho, Escassi, ante un comentario irónico durante la gala de Jorge Javier Vázquez sobre su buena relación, no se cortó en regalarle los oídos con piropos sobre la mujer estupenda que es.
Raquel pasa una semana difícil: tras el castigo de encierro impuesto por explicar cosas del exterior, ha amenazado varias veces con abandonar asegurando que no podía más y que no quería que sus hijos la vieran en unas condiciones que considera humillantes. Con tanta tensión, no es raro que haya acabado con una contractura en la espalda de aúpa.
Y ahí entra nuestro héroe patrio en forma de jinete, que resulta que también tiene unas manos maravillosas (como Sofía Cristo, según aseguró Nagore…) y que le ha dado un masaje de esos que te dejan cara de nirvana. La cara de Raquel mientras Escassi la masajea habla por sí misma. Está claro que este hombre es un derroche de virtudes de cara al sexo contrario…
Ahora bien, ¿el masaje en la espalda acabará en otros lugares del cuerpo? ¿Ocurrirá algo entre ellos? Raquel no parece el tipo de mujer, más bien Úrsula encajaría en su prototipo, pero teniendo en cuenta que son dos de los concursantes más estrategas, no sería raro que explotaran el filón de la historia de amor imposible.
Vía | www.telecinco.es
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