Para que luego digáis que a H&M sólo han ido chonis con ínfulas de hipsters… no, señores, no, os equivocáis, porque en H&M se reunieron el día de Versace algunas como Carmen Lomana, Bibiana Fernández, Soraya Arnelas, María José Suárez, y Andrea Guasch, así que además de chonis, había famosas. Entendenme, que a mí Bibana me cae muy bien…
Pues bien, llegó la señora Lomana y allí que la vieron, batallando entre mortales en la tienda, con dos cestas (una por mano, que si llega a tener tres manos, coge tres) y echando vestidos, bolsos, cazadoras y complementos varios como si no hubiera un mañana.
Luego se fue a la caja, con su tarjeta Visa Oro y allí lo pagó todo, todito, todo sin pensárselo y sin mirar el ticket. Dejadme decir que, de todas formas, me parece bastante cutre, porque si fuera guay de verdadtendría como minimo una American Express, con diamantes incrustados, o personalizada y esas cosa…
Por cierto, no os perdáis el detalle que pone la guinda la historia. Aquella noche se había excusado en el Casino de Madrid, donde la Fundación SOS y Follie Follie había organizado una cena benéfica. Pues no fue, y ahora todos saben por qué. ¡Porque quería hacer cola en H&M para comprar! Tela, telita, tela.
Bibiana dijo que iba por diversión, porque “Yo he tenido muchos Versaces buenos de verdad, de Alta Costura, pero tiene gracia tener uno más baratito para ponértelo sin miedo. Recuerdo mucho cuando íbamos Pedro (Almodóvar) y yo a los desfiles de Giani. Incluso en muchas películas que he hecho he llevado vestidos de la casa italiana.” Con esto se confirma que estos Versace no son “de verdad.”
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