La prueba de que la cosa está todavía muy fresca en su cabeza es el concierto que ofreció el pasado sábado en Connecticut. En mitad de una canción, la cantante no pudo contener las lágrimas y emocionó a todos los asistentes. Pero ¿qué es lo que provocó la llorera de nuestra querida Jennifer, en un momento que no se presta para ello?
La canción y el montaje tienen la culpa, ya que se trataba de una que hablaba de sus relaciones anteriores. El montaje de los bailarines rememoraba aquellos viejos tiempo con Sean Combs, Ben Affleck o, por supuesto, Marc Anthony. Hace solo un par de meses que abandonó el hogar familiar, y aunque sus razones tendrían para distanciarse, supongo que le da cosita recordarlo.
Pero atención, el momento en que las lágrimas comenzaron a aflorar en el bonito rostro de JLo fue, precisamente, el que recordaba a Marc Anthony y el tiempo que estuvo junto a él. Que no se olvida, al parecer, y que es tremendamente emotivo para ella. Lo que me lleva a pensar una cosa curiosa: ¿por qué narices en su concierto se pone a recordar a sus ex?
No acierto a comprender qué le ha motivado a hacer esto, si se va a poner a llorar a moco tendido, como puedes ver en el vídeo. Un concierto al que acudieron miles de personas, aunque hubo uno que no estuvo.Se trata de Bradley Cooper, que ha estado junto a ella durante varios días, cenando y compartiendo unas noches, presuntamente juntos. Él se perdió el montaje de sus predecesores y las lágrimas que le salieron a la cantante al recordarlos.
Después del concierto, quiso aclarar una cosa sobre el tema. Que no fue ver a los sosías de sus chicos en el escenario lo que le provocó las lágrimas, sino una imagen en la que aparecía con los niños, allí en el jumbo tron del estadio. Que le trajo muy buenos recuerdos sobre ellos, y no pensó, ni por asomo, en su ex-marido Marc Anthony. Mal pensados que somos, oye.
Vía | www.tmz.com
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