Pocholo Martínez Bordiú regresó a La Noria ayer para relatar un poco los mejores momentos de su vida. Con su habitual e incomprensible verborrea no dudó en pasarse de la raya con Cristina Tárrega, pedir los aplausos del público cuando le daba la gana y dar vergüenza ajena al ver cómo era incapaz de ligar dos frases seguidas.
Sobre Sonsoles Suárez comentó que “No es no es mi ex mujer, es parte de mi felicidad y lo será siempre, porque haber compartido con ella esos momentos nunca se olvida. Lo de ex lo retiro. Sonsoles ahora se casa con un chaval que se llama Wilson. Cuando nos fuimos a vivir a Uruguay, sintió que tenía muchas ganas de ayudar al prójimo y se fue a Mozambique. Allí conoció a Wilson, al que yo también conozco y le tengo cariño”.
Tras reconocer que le habría gustado tener un hijo con Sonsoles alabó la figura de Suárez del que comentó que “Es una persona amable, nunca se metió en lo nuestro, siempre nos apoyó en todo, siempre tuvo cariños para mí. Fue realmente ejemplar. De todas formas a mí no me decía nadie nada, porque si una mujer me gusta a mí, me la como yo”.
De Jimmy Jiménez Arnau, presente en la entrevista, dijo que “Lo importante de todo esto es que el camino que ha recorrido Jimmy lo ha hecho de una forma y yo de otro, pero la grandeza del ser humano es encontrarse y entenderse”.
Sobre el amor y el sexo comentó que “Nunca he estado en una orgía. A mí lo que me sube la moral es hacer el amor en el campo, con la moto debajo y bajo un árbol. Es que no tengo tiempo para irme a la cama, además me parece una horterada irse a la cama. Es cierto que no soy muy cariñoso, pero tampoco soy muy sexual, más bien soy voraz, pero siempre puedo mejorar”. Escrito queda.
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