El nuevo Routemaster ‘double-decker’

En Londres ya pueden presumir de una cosa más: ser la única ciudad del mundo que pronto tendrá una flota de autobuses de dos plantas diseñados exclusivamente para ella. Los nuevos Routemaster se inspiran claramente en sus predecesores, que han sido la imagen más icónica de la capital del imperio británico en el Siglo XX y, además, disponen de una tecnología híbrida que los convierte en uno de los transportes urbanos más ecológicos del mundo.

Hace aproximadamente dos años, te hablé de este proyecto que había ganado el concurso público para resucitar una de las imágenes más auténticas, pintorescas y mundialmente reconocibles de Londres: sus buses de doble cabina, que se habían ido jubilando progresivamente desde los 90. El ganador fue el proyecto Wrightbus, de un estudio de diseño e ingeniería de Irlanda del Norte. La semana pasada, en Trafalgar Square se ha presentado la primera unidad 100% funcional.

Este prototipo se construyó en los talleres londinenses de Heatherwick Studio, de un brillante rojo, el autobús dispone de tres entradas y dos accesos para silla de ruedas. Hay ventanales gigantescos que giran alrededor de la carrocería y de las escaleras a las segunda planta para dar al conjunto un aspecto de ligereza.

Quizá, el aspecto más práctico y original sea el final del autobús, que es una plataforma abierta que, me imagino, tendrán que probar que no genera accidentes con los usuarios, aunque me parece una idea genial. El habitáculo dispone de un asiento diseñado desde cero y casi revolucionario y de una tapicería bastante original. Además, sus responsables aseguran que se trata del transporte urbano más amigable con el medioambiente.

Su sistema de tracción híbrido desarrollado por Volvo es capaz de desplazar el vehículo con la mitad (640 g/km) de las emisiones de CO2 que los buses que actualmente ofrecen sus servicios en Londres (1.295 g/km). La primera unidad de pruebas comenzará a da servicio el próximo 20 de febrero en la concurrida ruta 38 (entre Victoria Station y Hackney) y será operado por la empresa Arriva.

Vía | Wired

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