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El plató de Mujeres y Hombres y Viceversa se vistió de gala y lujo, y no porque llegó una megaestrella ni nadie similar. La que entró en plató, y se llevó una gran ovación fue Toñi, la madre de Álvaro, el pretendiente de Laura. Se paseó por los distintos puntos del plató repartiendo los besos de presentación, incluyendo a la que podría ser, si todo va bien, en su nuera.
El motivo fueron las duras palabras que tuvo para su hijo David Morales. Le dijo que no tenía nada interesante en su interior, que era un típico chulo de discoteca y gimnasio y que ahí no había que pudiera hacerse valer. A Laura, la tronista, también la atacó. A ella le dijo que sus novios eran de ese estilo, que era lo ella buscaba y que se había fijado en el primero que le bailaba el agua.
Y eso ya no lo pudo soportar la mamá del pretendiente, que intercambió unas cuantas frases con David. Con mucha educación los dos, pero sin ningún tipo de respeto el uno por el otro, como se dejaba ver claramente en las pullas que se estuvieron lanzando un buen rato. Y esto no fue todo en el tiempo de la madre del pretendiente.
Todo vino por los tatuajes de Álvaro. En ellos se cuenta la historia trágica del joven, y como su padre abandonó a su madre cuando él estaba a punto de nacer, dejándola sin pareja y con un niño, en una época en que eso era casi, casi, un delito.
Tal y como se movieron las cosas con la mujer allí, Álvaro ha subido, todavía más, en la puntación de Laura. Que su madre le caiga tan bien a su tronista, le garantiza mucho buen rollo con ella, y eso es algo a tener en cuenta en un programa en el que se han de hacer valer. Y tiene puntos a su favor, además de hacer sentir a su tronista muy bien en la cita.
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