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Avanza el caso de la presunta paternidad de Justin Bieber, y me parece que Mariah Yeater, la mamá de 20 años que quiere encasquetarle el bebé a la megaestrella, lo tiene bastante crudo. Y es que el muchacho del flequillo imposible ya ha pasado por el Centro de Salud correspondiente y ha dejado su ADN para que se confirme o se niegue esa posibilidad.
Y ojo, que el chaval no estaba obligado a hacerlo, y ha sido todo voluntario por su parte. Muy seguro está para que luego pudiera llevarse una sorpresa con el tema. Y eso, parece que le libra de toda responsabilidad acerca del bebé, porque si no fuera así, bien tonto sería. Ahora le toca el turno a Yeater, quien afirma que mantuvo relaciones sexuales con el todavía niño Bieber y cuya hija es fruto de esa relación.
Tendrá que dar pruebas de ADN de su niño, y esperar al resultado de la prueba, que estará en unos días. Ya puede temblar la joven, ya que existen sospechas de quien puede ser el padre real del bebé, y esto solo confirmaría que se ha querido aprovechar del nombre del cantante para sacar tajada.
Los abogados del cantante están seguros de que todo se aclarará cuando la prueba esté finalizada, y aseguran que tomarán medidas contra la chica, para que esta situación no se repita en el futuro y no vayan saliendo bebés Bieber por todas partes. Que si ha querido aprovecharse, que lo pague, vamos.
Justin, pícaro él, ha querido desmarcarse de todo y ha tomado la iniciativa para que no haya la más mínima duda acerca del asunto, se ha presentado voluntariamente, y está dispuesto a colaborar para que todo termine cuanto antes mejor. Chico listo, que mantendrá mucho tiempo cogida su fortuna y a su chica, Selena Gómez, que ha estado en todo momento junto a él.
Vía | www.usmagazine.com
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